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LA ORACION
Noviembre- 26- 2009. Hechos. 22: 17-21
	La oración es el medio de comunicación que nosotros los cristianos tenemos. Para que haya un buen dialogo se necesita que intervengan dos o más personas, el uno habla, el otro escucha, después el que escuchaba habla y el otro escucha, de esta forma podemos decir que hay un verdadero dialogo, de lo contrario lo único que habría seria un monologo.

Oración efectiva: es aquella que logra su objetivo, llevar al orador a la presencia de Dios, pablo estaba tan acostumbrado a ese tipo de oración, que él dice que cuando estaba orando entraba en un estado de éxtasis, o una visión. V 17. Y me aconteció, vuelto a Jerusalén, que orando en el templo me sobrevino un éxtasis “Por éxtasis puede entenderse en general un estado de plenitud máxima, usualmente asociado a una lucidez intensa que dura unos momentos. Tras su fin, la vuelta a la cotidianidad puede verse incluso transformada por el evento previo, pudiéndose sentir aún algún grado constante de satisfacción. Es entonces una experiencia de unidad de los sentidos, en la que pensar, sentir, entender e incluso hacer están armónicamente integrados. el estado de éxtasis implica una desconexión con la realidad objetiva para conectarse con una realidad puramente mental conectada hacia sí mismo la persona que experimenta el éxtasis a menudo desconecta su sensorialidad hacia el exterior y la enfoca hacia el interior”

Como llegar a ese grado de oración: no todos pueden llegar a ese nivel, lo primero que necesitamos es tener fe, creer que la oración me puede producir esa sensación, y cumplir con algunos mandatos de Dios tales como.

a.      Estar en paz con Dios, creer que el ya me perdono, claro si es que nos hemos arrepentido de corazón, V 19 “Yo dije: Señor, ellos saben que yo encarcelaba y azotaba en todas las sinagogas a los que creían en ti”. Cuando nosotros aceptamos a Cristo en nuestro corazón, el nos hace nuevos ya lo pasado quedo atrás, 2 corintios 5: 17 “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas”, los recuerdos malos del pasado los utiliza Satanás para hacernos sentir indignos delante de Dios, no dejes que él se salga con la suya.

b.      Estar en paz con nuestros hermanos: una forma de demostrar que estoy bien con Dios es atreves de mi relación con los demás, 1 Juan 4:20 “Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?”.

·        La mala relación con los demás se convierte en estorbo para la Oración: 1 Pedro 3: 7 “Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo” puede ser una persona dedicada a Dios pero si mantiene una pésima relación con su esposa, sus oraciones no son escuchadas por él.

·        La mala relación con los demás hace que nuestra oración no sea agradable a Dios: Mateo 5: 23” Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti,
5:24 deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda”. Podemos estar en el culto alabando a Dios pero si no somos capases de perdonar al que me hizo daño, nuestra ofrenda de alabanza no es grata delante de Dios, no importa si le damos lo mejor de nosotros, Caín le dio lo mejor a Dios, pero su actitud era desagradable.

La verdadera oración hace que Dios se sienta gozoso: a través de la oración demostramos nuestro amor a Dios, cuando lo buscamos a Dios en oración le sacamos una sonrisa de sus labios. Proverbios 15: 8 “El sacrificio de los impíos es abominación a Jehová; 
Mas la oración de los rectos es su gozo” la mejor forma de hacerlo a Dios feliz es cuando nos postramos a adorarlo, en la oración el gozo de Dios se trasmite a nosotros y es por eso que al finalizar quedamos renovados, llenos de felicidad.

Oración de poder: cuando le creemos a las promesas de Dios, siempre salimos victoriosos, una promesa tremenda y llena de poder, es la de mateo 18. 19. “Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos”

Conclusión: la oración no solo sirve para hablar, la oración nos transporta a la presencia de Dios, nos da gozo, y tiene poder