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Juan 14: 6 “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” No hay duda de que Jesucristo es el único camino que nos conduce al padre celestial, ¿pero quién hiso ese camino? Indudablemente que, el que hiso es ese camino es Jehová de los ejércitos, su propio padre. EL PADRE NOS ENSEÑA: quien mejor para enseñarnos que el mismo que lo hizo. Jehová Dios. Salmos 25: 4-5 “Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus sendas. 25:5 Encamíname en tu verdad, y enséñame, Porque tú eres el Dios de mi salvación; En ti he esperado todo el día.” Y tú y yo como padres no podemos esperar grandes cosas de nuestros hijos si no les enseñamos. Si tú quieres que alguien haga lo que tú quieres, no pelees, ni te desesperes: ¡Enseña! Si tú tienes un gran sueño, una gran visión para tu familia, ellos no podrán ayudarte si no les enseñas tu visión, cuéntales cuáles son tus sueños, y enséñales cómo lograrlos. Tú eres el llamado a enseñarles a seguir el camino a la prosperidad y el éxito. Hay empresarios o amas de casa que pelean con sus empleados, solo porque no hacen lo que ellos quieren, la solución no es pelear la solución radica en enseñarle a ese empleado como es que el empresario o la ama de casa quiere su trabajo. EL PADRE NOS GUIA: un buen padre no solo le muestra el camino a su hijo, también lo guía. 27: 11 “Enséñame, oh Jehová, tu camino, Y guíame por senda de rectitud A causa de mis enemigos.” Si tú quieres que tus hijos marchen por un buen camino, no solo se lo muestres, tómalo de la mano y guíalo. AQUIEN SE DEBE ENSEÑAR: los que dicen que ya saben no necesitan que se les enseñe. Por lo tanto los candidatos perfectos para enseñarles son los que no saben. 25: 8 “Bueno y recto es Jehová; Por tanto, él enseñará a los pecadores el camino.” Muchas veces nos enojamos porque nuestros hijos no saben cómo actuar, lo que debemos hacer es enseñarles. Nuestro trabajo en la iglesia no es admirarnos por el pecado de los demás, nuestro trabajo es enseñarles el camino verdadero. Para que Jehová esté dispuesto a enseñarnos lo único que necesitamos es ser: Humildes y mansos. 25: 9 “Encaminará a los humildes por el juicio, DE QUE ME SACA ESE CAMINO: todo camino nos lleva a algún lugar, en especial saca al que está perdido. El saber que Cristo es nuestro camino nos saca de la angustia, la aflicción y nos libera de nuestros enemigos. 25: 17 “Las angustias de mi corazón se han aumentado; Sácame de mis congojas. 25:18 Mira mi aflicción y mi trabajo, Y perdona todos mis pecados. DIOS DESPEJA NUESTRO CAMINO: Jehová de los ejércitos no solo nos muestra el camino, también lo despeja para que podamos avanzar. 2Samuel 22: 33 “Dios es el que me ciñe de fuerza, Y quien despeja mi camino;”muchas veces dejamos que nuestro camino a la verdad se vea obstruido por los problemas, o por los diferentes prejuicios. Temores, envidias. Etc. ENSEÑA A TIEMPO: es necesario corregir cuando todavía hay tiempo, esto no quiere decir que después es imposible. Si dejamos que las cosas avancen tienen solución, solo que será más difícil, y en ocasiones, hasta doloroso. Hechos 18: 24-26 “Llegó entonces a Éfeso un judío llamado Apolos, natural de Alejandría, varón elocuente, poderoso en las Escrituras. APRENDE DEL QUE SABE: hay muchos cristianos que cuando tienen problemas, no acuden a Dios que todo lo sabe, acuden al hombre, y por eso siempre se meten en más problemas, el único que puede ayudarnos es Jesucristo. En alguna ocasión un hombre conducía su carro, era un Ford. En mitad de su camino el vehículo se quedo varado, el hombre le movía un a cosa , otra, y no lograba hacer que el carro funcionara; mientras estaba en esto, se acerco una hermosa limosina, se bajo un hombre muy elegante, quien se ofreció ayudarle, y le dijo muévale ese cable, apreté aquel otro, y será suficiente, el hombre todo inquieto no le creyó, le dijo: un hombre tan refinado como usted no puede saber de mecánica, y el hombre de la limosina se presento: yo no soy mecánico, mi nombre es Henry Ford, el inventor de este carro. Así es Dios el nos hizo y él sabe cómo arreglarnos cuando nos descomponemos. MANTENTE FIRME: el problema de muchas personas es que son de doble ánimo, un día opinan de una forma y al otro día opinan de otra forma muy diferente. Santiago 1:8 “El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos.” Las personas de doble animo nunca llegan a tener éxito, cuando están a punto de conseguirlo ya han cambiado de opinión. CONCLUSION: El que no conoce su camino está perdido, hay un dicho que dice: el que no sabe para donde va, cualquier bus le sirve. Enséñale a tus hijos el camino que quieres que ellos sigan se su guía. Dios desea enseñarnos lo único que él quiere es que seamos humildes, mansos, y temerosos de Dios.
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