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LOS TRIUNFOS EN LA CRUZ
Abril- 1- 2010
	Cuando Jesús está siendo llevado a la cruz, nosotros lo vemos como un acontecimiento mas, si acaso lo único que saca de nosotros es una expresión de pesar. Lo que no nos imaginamos es que en esos momentos el estaba librando una verdadera batalla. Que en el momento que muere y resucita sale vencedor. Jesús con su muerte logra un gran triunfo, por lo cual nosotros debemos estar felices. En semana santa como le llaman algunos deberíamos recordar esa gran victoria, deberíamos ser agradecidos, y hacer una gran celebración por que nos dio libertad.

Pero en realidad que pasa con el mundo, en esa semana es donde más accidentes se registran por el consumo de licor de muchos conductores, los balnearios están llenos y las iglesias vacías. 

Que debería significar:

·       Época de  reflexión sobre nuestra vida, y luchar por mejorar

·       Época de limpieza espiritual. Lucas 19: 45 “Y entrando en el templo, comenzó a echar fuera a todos los que vendían y compraban en él”

·       Época de darle lo mejor al Señor. Mateo 26: 6-7 “Y estando Jesús en Betania, en casa de Simón el leproso, 
26:7 vino a él una mujer, con un vaso de alabastro de perfume de gran precio, y lo derramó sobre la cabeza de él, estando sentado a la mesa”

·       Época de someternos a su voluntad. Mateo 26: 39 “Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú”

·       Época de revisar nuestra fidelidad. Mateo 26: 14 “Entonces uno de los doce, que se llamaba Judas Iscariote, fue a los principales sacerdotes”

¿Todo esto solo debería limitarse a una semana? Todos los días para Dios son santos, y sobre todo diariamente debemos buscar la santidad, nadie sin santidad podrá ver el rostro de Dios. Hebreos 12: 14 “Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor”

Cuando Jesús muere en la cruz, solo es el principio de una gran victoria que está por venir, muchas veces los problemas solo son el principio de algo maravilloso, los dolores de parto de una mujer no son más que el anuncio que una vida está a punto de llegar.

Jesús muere pero también resucita con gran fuerza y poder, en ese momento somos libres y Jesucristo logra varios triunfos en la cruz,  entre ellos:

·       En la cruz fue echado fuera el diablo perseguidor. Juan 12: 31 “Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera”

·       En la cruz Jesús atrajo al pecador. Juan 12: 32 “Y yo, si fuere levantado de la tierra, a todos atraeré a mí mismo”

·       En la cruz se nos abrió un camino. Mateo 27: 51 “Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo; y la tierra tembló, y las rocas se partieron”

·       En la cruz se nos perdono los pecados. Lucas 23: 42-43 “Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. 
23:43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso”

·       En la cruz somos reconciliados con Dios. Efesios 2: 16 “y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades”

Conclusión:

Los días de semana santa o la celebración de la santa cena en nuestras iglesias deben servirnos para conmemorar el maravilloso sacrificio que Jesucristo hizo por nosotros en la cruz, que murió pero que también resucito y ahora está a la diestra del padre como poderoso guerrero.

Estos días deben servirnos también para darle gracias por lo que él hizo por nosotros, el saber que ahora somos salvos y tenemos vida eterna debe ser ya un motivo para vivir agradecidos por siempre, sin importar las añadiduras, pues ellas también vendrán.

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