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ALIMENTO PARA EL ALMA
Octubre- 16- 2011- Salmos 36-37
	Alimentar: es ingerir cualquier clase de sustancia que sirve para nutrir el cuerpo o la mente. Alma: es la parte que maneja las emociones, y  el intelecto, por esta razón es lo que determina nuestro estado de ánimo. El alma y el cuerpo se manejaban como uno solo, el hombre llego a ser un alma viviente. 1 corintios 15: 45 “ Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu vivificante”

Pero cuando el hombre peco se llevo a cabo una separación del alma y el cuerpo. Génesis 3: 7 “Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales.” Antes de pecar se miraban sin ningún tipo de malicia. El cuerpo y el alma actuaban como uno solo. A partir de ese momento se libra una batalla entre el espíritu, el alma y el cuerpo. Hoy en día podemos encontrar todavía algunas tribus donde pueden vivir desnudos o semidesnudos y no tienen problema.

El canal que alimenta nuestra alma son los ojos y los oídos, la fuente de donde se tomas dicho alimento es el mundo, o el medio en el que vivimos.

Hay muchas formas de alimentar el alma, pero en esta ocasión estudiaremos tan solo una.

La prosperidad y la maldad de los incrédulos.  36: 1 “La iniquidad del impío me dice al corazón:
No hay temor de Dios delante de sus ojos” no hay cosa que le duela más aun cristiano recién convertido y aun a muchos ya con bastantes años en la vida cristiana, que ver prosperar a un pecador. Le parece que es injusto de parte de Dios, este hecho ha provocado la deserción de muchos cristianos.

Lo que puede producir en el alma de un cristiano el depositar sus ojos en el éxito de un no creyente:

1. IMPACIENCIA: 37: 1 “No te impacientes a causa de los malignos, Ni tengas envidia de los que hacen iniquidad.”

2. ENVIDIA: esto daña nuestro corazón. 37: 1b

3. NOS ALTERA: 37: 7b “Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino” nos cambia la esencia, la naturaleza, nos convierte en alguien que no somos.

4. NOS LLENA DE IRA: 37: 8 “Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna a hacer lo malo.” nos incita a cometer cosas malas, y lo que es peor muchas veces seguimos el mal ejemplo de los del mundo. 37: 21 “El impío toma prestado, y no paga; Mas el justo tiene misericordia, y da.”

5. SENTIMOS DESFALLECER, Y HASTA NOS ENFERMAMOS. 38: 17 “Pero yo estoy a punto de caer, Y mi dolor está delante de mí continuamente.”

¿Qué debemos hacer?

1. Confesar nuestro pecado: y desechar todo lo malo de nuestro corazón. 38: 18 “Por tanto, confesaré mi maldad, Y me contristaré por mi pecado” si sabemos que sentir envidia por la prosperidad de los impíos es pecado, también es necesario que nos arrepintamos.

2. No dejarnos influenciar por los demás. 37: 3, 27 “Confía en Jehová, y haz el bien;
Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad; 27 Apártate del mal, y haz el bien, Y vivirás para siempre.” nuestra obligación es que los de afuera se conviertan a nosotros y no que nosotros nos convirtamos a ellos. No podemos actuar de acuerdo a las circunstancias.

3. Deside ser Feliz: 37: 4 “Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón.” la felicidad es una decisión personal, la felicidad no depende de los demás.

    * El manso vive en Paz: 37: 11 “Pero los mansos heredarán la tierra, Y se recrearán con abundancia de paz.” Muchas veces es necesario ceder para poder vivir en paz. Un señor cumplió cuarenta años de matrimonio, unos amigos le preguntaron que como lo había conseguido y el les contesto; yo nunca le llevo la contraria, ellos dijeron: no eso que va ser posible; y el les contesto, ha…entonces no.

4. Disfruta lo que tienes: 37: 16 “Mejor es lo poco del justo, Que las riquezas de muchos pecadores.” La infelicidad de una persona comienza cuando no valora lo que tiene, y anhela lo que no tiene.

5. Espera en Jehová: 37: 34 “Espera en Jehová, y guarda su camino, Y él te exaltará para heredar la tierra; Cuando sean destruidos los pecadores, lo verás.” Parte de la fe, es saber esperar el tiempo de Dios, muchas personas lo pierden todo por la impaciencia.

CONCLUSION

Tu eres lo que crees que eres, no dejes que la prosperidad de los malvados, envenenen tu alma, recuerda, al envenenado no le queda sino la muerte.

Disfruta lo que tienes y decide ser feliz.

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